Política de gestión ambiental: qué incluir y cómo redactarla

La política de gestión ambiental es el documento en el que la organización y la Alta Dirección declaran sus objetivos para proteger el medio ambiente de los efectos que ocasiona su operación. También afirman su compromiso con el cuidado y protección del ambiente y describen brevemente cómo piensan hacerlo. Este documento, la política de gestión ambiental, es obligatorio para las organizaciones que han implementado un estándar de gestión, como ISO 14001. Para las demás, es voluntario, lo cual no significa que no sea importante. La política de gestión ambiental, en cualquier caso, demuestra a empleados y terceros fuera de la organización, que esta se compromete con el cuidado del medio ambiente, que hará todo lo posible por no afectarlo negativamente y trabajará de forma responsable para mejorar las condiciones medioambientales en su comunidad.

¿Cómo redactar una política de gestión ambiental?

La política de gestión ambiental responde a las necesidades, contexto y condiciones únicas de la organización. Por esto, tomar una plantilla y reemplazar las partes procedentes, como el nombre de la organización, no resulta una buena idea. Lo que sí se puede hacer es adoptar un formato que se adecúe al contenido único de la organización y permita desarrollar las ideas que se expresarán en la política. Una vez se define un formato, es bueno seguir estas recomendaciones

1. Obtener el apoyo de la Alta Dirección

La Alta Dirección es el signatario natural de una política de gestión ambiental. Por ello, para no perder tiempo y no tener que echar atrás el trabajo, conviene someter el contenido a su aprobación. Es importante enfatizar ante la Alta Dirección los beneficios en la reducción de costes, cumplimiento de normas, seguridad de los trabajadores y de la comunidad, entre otros, para obtener su compromiso.

2. Definir los objetivos

Los objetivos de una organización del mismo sector que opera en un área cercana, del mismo tamaño, no son necesariamente iguales. Los objetivos son el resultado de una evaluación de riesgos ambientales, del registro histórico de comportamiento ambiental y de lo que, en definitiva, falte por hacer para asegurar una protección efectiva del entorno ambiental. Los objetivos definidos deben ser realistas, relevantes, alcanzables y medibles.

3. Crear un documento breve y conciso

Cuanto más breve el documento, más aceptación tendrá y más fácil será comunicarlo. Sin embargo, esto no es un requisito mandatorio, especialmente si para cumplirlo es preciso sacrificar la facilidad de comprender el documento y el alcance en cuanto al contenido.

4. Comunicar la política

La política debe documentarse con los requisitos que para ello exija el estándar implementado o los procedimientos adoptados por la organización. Pero más allá de la existencia firmada del documento en papel, es importante que el contenido se divulgue en el sitio web de la organización, en espacios públicos físicos dentro de la organización, en la intranet y que se distribuyan copias a trabajadores, contratistas y otras partes interesadas.

¿Qué tener en cuenta para redactar la política de gestión ambiental?

Aclarado el tema de la forma, es necesario abordar el de fondo. Hay aspectos esenciales que no pueden quedar fuera de la política de gestión ambiental. Entre ellos, los siguientes:

• La legislación ambiental, local, nacional o internacional.
• Las exigencias y requisitos de organismos reguladores.
• Los requisitos de un estándar, si se ha implementado.
• Las expectativas de las partes interesadas, entre ellas, los empleados y la comunidad.
• Gestión de riesgos ambientales en la organización.
• Resultados históricos de la gestión ambiental.
• Periodicidad con la que se actualizará el documento.
• Compromisos con la protección del medio ambiente.

¿Qué incluir en la política de gestión ambiental?

La política, como ya se anotó, es un documento que recoge la intención, el propósito y el compromiso de una organización con respecto a la protección del medio ambiente. Sin embargo, hay algunos temas que deben formar parte del contenido, algunos con mayor profundidad que otros. A modo de checklist, el documento debe abordar, aunque con declaraciones breves y concretas, los siguientes temas:

• Misión organizacional, en la cual se mencionan de forma sucinta las operaciones que tienen mayor impacto ambiental.
• Compromiso de mejora de la gestión, de los procesos y de los procedimientos para disminuir el impacto ambiental.
• Compromiso para gestionar oportuna y ágilmente los problemas ambientales, y evitar la repetición.
• Expectativas de la organización con respecto a la gestión, misma que se extiende a los proveedores, clientes y otros miembros de la cadena productiva.
• Declaración de cumplimiento de la legislación y requisitos de organismos ambientales o solicitudes de la comunidad.
• Propósito de alcanzar un nivel mínimo de desempeño en la gestión ambiental.
• Mecanismos de supervisión del éxito de la gestión y del cumplimiento de objetivos (cuándo y cómo se hará).
• Compromiso de asignar los recursos de formación y capacitación que se requieran para cumplir con los objetivos.
• Compromiso de comunicar los resultados de la gestión a todos los empleados y a las partes interesadas externas.

Otros temas adicionales relevantes

Algunos asuntos puntuales y específicos pueden requerir un espacio en la política, siempre recordando la importancia de la extensión y de la concreción que el documento necesita:

• Requisitos de disposición de deshechos o de prevención de contaminación de fuentes de agua.
• Procedimientos de reciclaje de envases o de residuos de materias primas.
• Optimización del uso de recursos energéticos.
• Procedimientos para eliminar ruidos o evitar contaminación visual o ambiental en la comunidad.
• Procesos para disminuir las emisiones de carbono al medio ambiente.
• Uso obligatorio de insumos biodegradables.
• Prohibición del uso de elementos tóxicos como el plomo o el asbesto, entre otros.

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La redacción y comunicación acertada de una política de gestión ambiental refleja el compromiso y el interés de una organización por cumplir con su responsabilidad ambiental y contribuye a la creación de una cultura sólida de prevención de riesgos ambientales en toda la organización. Para llevarlo de la teoría a la realidad, es importante contar con el debido apoyo tecnológico: el plataforma tecnológica HSETools es una solución informática avanzada, modular y parametrizable, capaz de adaptarse a las necesidades específicas de la organización. Es más fácil entender el potencial de las funcionalidades de esta herramienta viéndola en acción: toma una plaza en nuestra demo semanal sin coste alguno. Reserva tu lugar aquí.